lunes, 22 de marzo de 2010

El primer mapa de las costas de México impreso en España



Entre los fondos de la Biblioteca de la Universidad de Sevilla se conserva uno de los más valiosos y raros mapas impresos de América. Se trata de una sencilla, pero hermosa, xilografía que describe el Caribe y el golfo de México, y que sirvió de ilustración a la edición príncipe de la Primera Década del Nuevo Mundo, obra escrita por Pedro Mártir de Anglería e impresa en Sevilla, junto a otras obras del mismo autor, por el conocido impresor Jacobo Cromberger, en el año 1511(P. Martyris angli mediolanensis opera Legatio baylonica Occeani decas Poemata Epigrammata...). El mapa ha sido objeto de numerosos estudios y todavía hoy suscita gran interés entre los especialistas. Carente de cualquier tipo de indicación expresa acerca de su autor y su posible fecha de realización, son muchas las incógnitas que aún genera su análisis y muchas las hipótesis argumentadas en torno a su origen, sin que ninguna haya podido ser demostrada plenamente.

Algunos especialistas consideran que el mapa fue realizado por el piloto Nuño García de Torreño (Torre Revello, Mendoza Vargas), aunque la mayoría lo atribuyen Andrés de Morales, amigo de Pedro Mártir de Anglería, y reputado cartógrafo. Andrés de Morales acompañó a Cristóbal Colón en su tercer viaje y formó parte de la expedición que en el año 1500 realizaron Juan de la Cosa y Rodrigo de Bastidas a la costa de Tierra Firme. Nicolás de Ovando le encargó expresamente la realización de un mapa de las islas del Caribe y de las costas descubiertas (Nebenzahl, Mendoza Vargas, Gil, Cuesta Domingo). Es posible que este mapa de Andrés de Morales, datado hacia el año 1509, fuera tomado como modelo o inspiración por el autor de la xilografía que aquí se está comentando (Gil). Pedro Mártir de Anglería, en su Tercera Década, narra cómo el propio Andrés de Morales, se lo presentó, manejándolo para su obra: “Los que primeramente recorrieron la isla me la pintaron semejante a una hoja de castaño... Empero, el piloto Andrés Morales me la ha presentado con otro, aunque parecido dibujo, porque en sus dos extremos, es decir oriental y occidental, la describe penetrada por grandes golfos que extienden sus puntas considerablemente, situando dentro del oriental unos amplios y seguros puertos”. (Década III, libro VII).

Las mayores objeciones a esta hipótesis provienen de aquellos especialistas que han analizado el mapa desde la óptica de la historia de los descubrimientos y la geografía. Autores como, J. Varela Marcos, cuestionan la posibilidad de que en tiempos de la expedición de Andrés de Morales se pudiera cartografiar con tanto detalle lugares y territorios que no fueron descubiertos hasta varios años después, como la costa de la Península de Yucatán y la siguiente costa mexicana. Esta contradicción le lleva a proponer la hipótesis de que el mapa fuese el resultado de la expedición de Ponce de León a la Florida en el año 1513 y que sus autores fueran en realidad el propio Pedro Mártir de Anglería y Juan Rodríguez de Fonseca, los únicos en ese momento con capacidad y conocimientos suficientes para realizarlo, hacia el año, estima, 1514. Otros geohistoriadores, como G. Vargas Martínez, admiten que el mapa anticipa en seis años las referencias que ofrece Bernal Díaz del Castillo sobre las exploraciones de Francisco Hernández de Córdoba en Yucatán, pero no cuestionan su fecha de realización, todo lo contrario, lo toman como una prueba más del antiguo conocimiento que se tenía del golfo de México y, más en concreto, del cuestionado viaje portugués de Américo Vespuccio al mismo, en el año 1497.

Los que, como J. Varela Marcos, consideran que el mapa no pudo imprimirse hasta el año 1514, avalan la idea de que la xilografía en cuestión no formara parte del proyecto editorial inicial de la obra de Pedro Mártir de Anglería cuando se imprimió por vez primera en Sevilla, en abril de 1511, sino que se estampara más tarde, para ser cosido o encuadernado a los ejemplares de la obra ya impresos, bien por el impresor, bien por los libreros o propietarios particulares. La cuestión es compleja porque, en efecto, de la edición de 1511 existe una emisión con variantes por recomposición del texto en dos de sus hojas y sin mapa, en la mayoría de los ejemplares conservados (Norton 800 B, Martín Abad (b) 52 B) y, si bien, los especialistas en libro impreso antiguo no cuestionan que el mapa formara parte de la edición de 1511, lo cierto es que se conserva un mapa sin libro y sin guillotinar en la Osner Collection de la Universidad de Maine Meridional.

En el caso concreto del ejemplar conservado en la Biblioteca de la Universidad de Sevilla, el mapa, junto con la fe de erratas correspondiente a la Legatio babylónica de 1511(Norton, 800 A), se encuentra encuadernado, al final de otra edición de las Décadas del Nuevo Mundo, en concreto, de la segunda, impresa en Alcalá de Henares por Arnao Guillén de Brócar, en el año 1516, también ahora publicada junto con la obra Legatio bayilónica del mismo autor (J. Martín Abad (a) 49 A). No sabemos en qué momento, ni por qué motivos, estas hojas de la edición de 1511 llegaron a incorporase a la edición de 1516, pero bibliógrafos como A. Palau y Dulcet dan cuenta de la existencia de ejemplares de esta segunda edición que llevan añadida la edición sevillana de la Legatio Babilonica, impresa por Jacobo Cromberger en 1511.

No es mi objetivo resolver en este espacio todas las interrogantes que todavía subsisten en relación a la publicación de esta obra, tan sólo dar a conocer el hallazgo de este sugerente mapa que, además, lleva en su dorso una dedicatoria a Cisneros y una interesante explicación cartográfica, que también merece la pena conocer y reproducir aquí.

Margarita Gómez Gómez.
Universidad de Sevilla

Para saber más:

M. Cuesta Domingo, “El tratado de Tordesillas y la cartografía en la época de los Reyes Católicos”. En El tratado de Tordesillas en la cartografía histórica. Junta de Castilla y León, 1994, pp. 53-84.

J. Gil, Mundo viejo, mundo nuevo: selección de mapas del siglo XVI. Sevilla, 1989

J. Martín Abad (a), La imprenta en Alcalá de Henares (1502-1600). Madrid, 1991.

J. Martín Abad (b), Post-incunables ibéricos. Madrid, 2001.

K. Nebenzahl, Atlas de Colón y los grandes descubrimientos. Madrid, 1991.

F.J. Norton, A descriptive catalogue of printing in Spain and Portugal: 1501-1520. Cambridge, 1978.

A. Palau y Dulcet, Manual del librero hispano-americano: inventario bibliográfico de la producción científica y literaria de España y de la América Latina desde la invención de la imprenta hasta nuestros días, con el valor comercial de todos los artículos descritos. Barcelona, 1923-1927.

J. Torre Revello, “Pedro Mártir de Anglería y su obra de Orbe Novo”, Thesaurus, t. XII, 1957, pp. 132-153.

G. Vargas Martínez, “La Nueva España en la cartografía europea”. En México a través de los mapas. México, 2003, pp. 15-31.

J. Varela Marcos, “Las costas mexicanas en el primer mapa impreso de América”. En Revista de Humanidades: Tecnológico de Monterrey, 19, 2005, pp. 145-166.

1 comentario:

Tiktok de ETN dijo...

Excelente artículo, muchas gracias por compartirlo.